Bienestar Ocupacional realiza continúa con un importante trabajo de concientización en Bolivia sobre el uso de dispositivos que emiten ondas electromagnéticas. En esta ocasión compartimos un segundo artículo realizado por nosotros y publicado en la Revista Familia de circulación gratuita:

Un buen pasatiempo para muchas madres es ver y compartir imágenes en Facebook de sus hijos e hijas que van creciendo. Las abuelas que ven aquellas imágenes muchas veces identifican sus propios rasgos en sus nietos, ya sea una sonrisa, una mueca o un guiño de ojos. Cada expresión, forma, color en el cuerpo de un niño es el resultado de una acumulación y mezcla de distintos genes que fueron pasados de generación a generación. Así se hace una hermosa familia de muchas generaciones.

¿Pero qué pasa cuando la genética falla, y tus hijas, no tienen el material genético adecuado para dar a sus propias hijas? Entonces las imágenes a compartir serán limitadas, y la felicidad mermada. Puede que Facebook ya no esté en boga, pero el daño por haberlo usado por medio del WI-FI estará escrito por las generaciones venideras. Así advierte Barrie Tower, físico británico quien es un experto jubilado en uso de armas de microondas para su país. El declara lo siguiente, después de ver que las ondas de WI-FI, eran muy similares a las que ellos usaban en sus experimentos: “El problema con las chicas jóvenes es que se ha demostrado que la irradiación de microondas daña la estructura genética de sus ovarios. Las niñas nacen con todos los óvulos que necesitan en sus ovarios al nacer. Son óvulos inmaduros, por lo tanto, susceptibles a daños durante el crecimiento. Las microondas son genotóxicas (existen experimentos vinculados con niños que muestran que la radiación de telefonía móvil de bajo nivel altera la bioquímica de las células del folículo en una cámara de huevos de mamíferos), por lo tanto, la radiación de microondas podría afectar a la estructura genética de los huevos. El problema aquí es que el ADN mitocondrial, los genes dentro de los ovarios, es irreparable. Si usted tiene una niña que se daña, a través de este mecanismo, la estructura genética de uno de sus huevos y ella tiene una hija, la hija tendrá ese problema genético, porque es irreparable. Y su hija llevará ese problema genético, porque es irreparable. Y cada mujer para siempre, en esa línea, llevará ese problema de forma perpetua, porque es irreparable.”

También lo dice el Dr. Goldsworthy, afamado experto en campos electromagnéticos, que las ondas inalámbricas no solo afectan a las células, sino que también predice que un espermatozoide y un óvulo genéticamente dañados pueden llevar a una descendencia mutante quizá en generaciones a lo lejos. Si usted piensa en los niños con estos transmisores cerca de sus regazos, la cuestión debe ser, "¿por qué correr este riesgo por el bien de un trozo de cable y un enchufe, que podría sustituir al WI-FI sin pérdida de rendimiento?

Si estas esperando un bebe, y quieres compartir tu felicidad por los medios sociales, debes usar el internet con cable, y evitar los dispositivos móviles que usan WI-FI. La regla general es que los niños no estén expuestos al WI-FI. Los adultos debemos apagar el WI-FI en la noche y sólo usarlo cuando sea imprescindible y no por largos periodos.

Redacción:

Rodrigo Arteaga - Bienestar Ocupacional